0 likes
La pendeja colegiala estaba re jodida después de clases, se hacía la difícil al principio, pero terminó re sumisa y bien zorrita. El profe le ofreció ayuda extra, pero lo que realmente quería era meterle la pija hasta el fondo. La nena, toda apretadita y con uniforme escolar, se resistía, pero al final no pudo negarse a probar ese trozo de carne duro y venoso. Se arrodilló como buena putita y empezó a chupar como si no hubiera un mañana. Después, el profe la puso en cuatro y le dio con todo, haciéndola gemir y suplicar por más. La piba, que al principio fingía no querer, terminó pidiendo que la cojan bien duro y sin parar. ¡Una escena de colegiala cachonda que te va dejar con la poronga a punto de explotar!












