la jovencita le dice que lo haga despacio por que le esta doliendo

La jovencita, con una mezcla de placer y dolor, susurró: «Despacio, por favor, me está doliendo.» Su voz, suave pero firme, temblaba ligeramente. Él, al notar su incomodidad, detuvo sus movimientos, su expresión cambiando a una de preocupación. «Lo siento, amor,» murmuró, besando su frente con ternura. «Iremos más despacio.» Con movimientos suaves y cuidadosos, comenzó a explorar de nuevo, sus caricias delicadas y llenas de atención. «Así, así está mejor,» jadeó ella, su respiración comenzando a estabilizarse. Él, con una sonrisa comprensiva, continuó, sus empujes lentos y controlados, asegurándose de que cada movimiento fuera placentero para ambos. «No te preocupes, vamos a disfrutar esto,» susurró, su voz cargada de deseo y cuidado. Ella, con una sonrisa tímida, asintió, su cuerpo relajándose en sus brazos. Juntos, encontraron un ritmo que les permitió disfrutar del momento, sus gemidos y suspiros entrelazándose en una sinfonía de pasión y comprensión. «Más suave,» susurró ella, su voz entrecortada. Él, obedeciendo, ajustó sus movimientos, llevándolos a ambos a un éxtasis controlado y placentero.