su novia la dice al vergon del novio que lo haga despacio por la esta lastimando

Con una voz suave pero firme, la novia le susurra al novio: «Hazlo despacio, por favor, me estás lastimando.» Él, al escuchar su ruego, se detiene inmediatamente, su preocupación evidente en su rostro. Con movimientos suaves y cuidadosos, se ajusta, dándole espacio para respirar. La cámara, que ha capturado cada momento, ahora capta la intimidad de su conexión, un recordatorio de que el amor y el respeto son fundamentales, incluso en los momentos más intensos. Con una respiración más controlada, él reanuda sus movimientos, esta vez con una lentitud que la enciende, cada embestida calculada para no hacerle daño, pero intensificando el placer. La intensidad aumenta gradualmente, sus gemidos se vuelven más intensos, hasta que finalmente alcanzan un clímax explosivo, sus cuerpos temblando en una liberación intensa y satisfactoria, cada fibra de su ser vibrando con el éxtasis de la conexión y el cuidado mutuo.